El maltrato a la mujer, física y psicológicamente se da en los hogares donde la organización familiar se caracteriza por el autoritarismo, donde la mujer es la que sufre los actos de violencia. Esto se acentúa cuando el cónyuge consume droga o alcohol.
La mujer que ha sido maltratada, manifiesta miedo por sí misma y por los hijos. La verguenza, baja estima y el desconocimiento de sus derechos la inhibe para buscar ayuda, teniendo que soportar todos los actos de violencia que sobre ella se practican.
Para superar estas situaciones se requiere de una práctica de una convivencia familiar donde se realice la democracia y la comprensión.
No hay comentarios:
Publicar un comentario